jueves, octubre 19, 2006

Remembranza

Desde su convalescencia, que la volvió más introspectiva que de costumbre (pasa largas horas conversando por teléfono consigo misma), la tía Laura nos envía el siguiente mensaje:

Cuando yo era pequeña corría como una gallina perseguida por los perros. Ahora que soy una ancianita, corro como una bolita.

1 comentario:

unsologato dijo...

se le aplaude con las patitas de atrás!!!